Si estamos decididos a transformar nuestra manera de alimentarnos, y a la vez queremos contribuir de forma responsable al medio ambiente, el armado de huertas en los hogares, es un enorme paso para que nuestra vida se beneficie en un 100 por ciento.

El primer paso empieza en nosotros mismos. “Para emprender nuestra huerta debemos estar completamente decididos a aportar un poco a la naturaleza. Decididos a cambiar, los hábitos de alimentación”, detalla Federico Flores, técnico agropecuario, especializado en agricultura urbana agroecológica.

“La organización es importante. Nuestra huerta va a depender del espacio del que dispongamos y del tiempo que tengamos para cuidarla. Estos factores son fundamentales para la decisión”, afirma María Eugenia Páez, permacultora, a cargo del proyecto Huerta Fresca.

Cómo incide el sol

“Para la vida de huerta hay que observar la incidencia del sol en nuestro balcón, en nuestra galería o en el fondo. La mayoría de las plantas necesitan un mínimo de cinco horas de sol directo, porque eso las beneficia”, agrega Flores, propietario de un vivero huertero.

SEÑALADORES. Es importante cuidar las plantas desde que nacen.

¿Todos pueden tener una huerta? “No es lo mismo disponer de un buen espacio en el jardín que en el departamento de un edificio en altura. Las plantas necesitan cierta cantidad de horas de luz, de viento, de humedad ambiente. Si sólo se dispone de un balcón para hacer la huerta, lo mejor es tener aromáticas, ya que no requieren tantas horas de luz y les gusta la media sombra”, especifica Páez.

“Todos pueden tener huerta, ya sea en departamentos o en una casa. Es más, se puede empezar en cualquier recipiente, cantero. En cualquier espacio donde nuestros abuelos o alguna vecina tenga una plantita, también puede ir una planta de lechuga o una planta de rúcula. El espacio no es condición”, asevera Flores

Cuidados

Las huertas que más sufren las altas temperaturas propias del verano son las que están en macetas, cajones y recipientes. Esto ocurre porque están más expuestas al sol. Las recomendaciones que nos brinda Flores para cuidar las huertas del calor son las siguientes:

• Regarlas de manera abundante por la mañana. Es mejor hacer dos riegos: a la mañana y a la tarde

SABOR ÚNICO. Las verduras de la huerta son más ricas que las del súper.

• Asociar las plantas: es decir que estas se protejan unas con otras en un espacio cercano, como un mismo cantero e incluso una misma maceta.

• Hacer coberturas: en vez de tirar el pasto recién cortado o las hojas que vamos sacando de otras plantas, utilizarlos para hacer una capa abundante en el suelo para que no pierda la fertilidad, ni tampoco el agua que se riega. Se mantiene mejor la humedad en la superficie.

Cosecha

Lo que se extrae de las huertas son productos excepcionales que distan muchos de los que compramos en los mercados. “Son de excelente calidad, de sabor exquisito. Por eso muchas personas se enamorar de los cultivos y comienzan su huerta. Es decir, que hay huerteros que por ahí están desencantados de consumir lechuga o tomate de verdulerías porque les caían mal. Generalmente las hortalizas de hojas que compramos en mercados tienen aplicaciones de productos químicos, y eso es lo que hace mal al organismo”, sentencia Flores.

“Nuestro trabajo siempre debe estar en el suelo, cuanto más rico es, más beneficios tenemos, más calidad en las hojas y en la cantidad de raíces. Para ello debemos tener siempre una compostera al lado de nuestro huerto”, agregó, Páez, por su lado.

Amos profesionales, destacan la importancia de generar nuestra propia huerta, que es un trabajo que se puede compartir con toda la familia, que impacta positivamente en nuestras vidas, destacaron.